El invierno está a la vuelta de la esquina en España y las bajas temperaturas comienzan a sentirse. El frío no solo afecta a las personas sino también a los animales de compañía, sobre todo los perros que salen a pasear a las calles con frecuencia. Por esa razón, para que tu perro no pase frío es recomendable que sigas estos consejos, ya que ayudará al animal a sentirse cómodo y así previenes que se enferme en esta época gélida que se avecina.
Si tienes a cargo un animal doméstico debes ser responsable de su bienestar y reconocer cómo detectar si está sufriendo de frío. Además, es primordial saber cuáles son las consecuencias de las bajas temperaturas en la salud de tu perro para que puedas tomar las previsiones y medidas necesarias para su cuidado.

Cómo sabemos que un perro tiene frío
Es fundamental saber cuándo nuestro animal de compañía está padeciendo a causa de las bajas temperaturas. Uno de los signos más evidentes de detectar son los temblores. Generalmente, el hecho de que tu animal tiemble es una reacción del cuerpo en respuesta al frío. La excepción son los perros de raza chihuahua que reaccionan con constantes temblores causados por excitación o por su metabolismo.
Otra manifestación que debemos tener en cuenta para saber si un perro está sufriendo de frío es la rigidez muscular. Es importante estar atentos si existe tensión muscular en su cuerpo. En caso de que la haya, podemos auxiliarlo dándole un suave masaje por todo el cuerpo para ayudar a que relaje los músculos y pueda moverse con mayor facilidad. Asimismo, las temperaturas bajas pueden ocasionar otras consecuencias en el animal como respiración más lenta de lo normal, somnolencia o piel excesivamente reseca.

Cómo proteger al perro
Se debe proteger con especial atención las almohadillas de las patas y los oídos de los canes. Si se descuidan las almohadillas de las patas, estas pueden agrietarse, causar molestias y estar susceptibles a lastimarse al caminar. Por tanto, se recomienda hidratar con crema humectante las patas de nuestro perro.
Por otro lado, si no se protegen bien los oídos el frío puede ocasionar otitis, una enfermedad en los oídos que es muy molesta para el animal. Lo mejor que podemos hacer por nuestro amigo peludo es secarle bien las orejas cuando llueva para mantener esa zona libre de humedad.
De igual forma, para que tu canino no pase frío puedes ayudarlo con una manta para mantener la temperatura corporal a niveles cálidos. En caso de salir a pasear puedes protegerlo con un abrigo. Cabe destacar que es fundamental mantener el pelaje del animal largo, ya que este será su protección natural contra las bajas temperaturas.
Si tomamos en cuenta todos estos consejos también podemos prevenir que nuestro animal de compañía pueda enfermarse debido a las patologías causadas por el frío tales como resfriado, faringitis, bronquitis o pulmonía.